¿Alguna vez has probado unas croquetas tan cremosas por dentro y crujientes por fuera que te hacen cerrar los ojos de placer?
¡Estas Croquetas de Jamón son justo lo que necesitas! Este clásico de la cocina española es perfecto para compartir en reuniones, como aperitivo o incluso como plato principal. Aunque pueden parecer complicadas, con esta receta paso a paso verás que son más fáciles de preparar de lo que piensas. Además, el jamón le da un sabor único que las hace irresistibles. ¿Listo para cocinar? ¡Vamos a ello!
Por qué te encantará esta receta de Croquetas de Jamón
Esta receta es especial por varias razones:
- Sabor auténtico: La combinación del jamón con la bechamel crea un relleno delicioso y cremoso.
- Textura perfecta: Crujientes por fuera y suaves por dentro, son un verdadero placer para el paladar.
- Versátil: Puedes servirlas como tapa, aperitivo o plato principal acompañado de una ensalada.
- Ideal para compartir: Es un plato que gusta a todos y es perfecto para reuniones o celebraciones.
Tiempo de preparación y cocción de las Croquetas de Jamón
- Tiempo de preparación: 30 minutos
- Tiempo de cocción: 20 minutos
- Tiempo total: 50 minutos (más tiempo de reposo)
- Porciones: 20-25 croquetas
- Calorías aproximadas por porción: 100 kcal
Ingredientes para las Croquetas de Jamón
Para la masa:
- 50 g de mantequilla
- 50 g de harina
- 500 ml de leche entera
- 150 g de jamón serrano, picado finamente
- 1 pizca de nuez moscada
- Sal y pimienta al gusto
Para el rebozado:
- 2 huevos batidos
- 100 g de pan rallado
- Aceite de oliva o girasol (para freír)
Instrucciones paso a paso
Para la masa:
- Prepara la bechamel: En una sartén, derrite la mantequilla a fuego medio. Añade la harina y mezcla bien hasta formar una pasta.
- Incorpora la leche: Añade la leche poco a poco, batiendo constantemente para evitar grumos. Cocina a fuego lento hasta que la mezcla espese.
- Añade el jamón: Incorpora el jamón picado, la nuez moscada, la sal y la pimienta. Mezcla bien y cocina por 2-3 minutos más.
- Enfría la masa: Vierte la masa en un plato y cubre con papel film, asegurándote de que toque la superficie para evitar que se forme una costra. Refrigera durante al menos 2 horas (o toda la noche).
Para el rebozado:
- Forma las croquetas: Con la masa fría, toma porciones pequeñas y dales forma de cilindro o bola con las manos.
- Reboza: Pasa cada croqueta por huevo batido y luego por pan rallado, asegurándote de que queden bien cubiertas.
- Fríe las croquetas: Calienta abundante aceite en una sartén y fríe las croquetas a fuego medio hasta que estén doradas por todos lados. Escúrrelas sobre papel absorbente.
Sugerencias de presentación
- Acompañamientos: Sirve con una ensalada fresca o una selección de otras tapas, como tortilla española o patatas bravas.
- Presentación: Coloca las croquetas en una fuente amplia y decora con perejil fresco picado.
- Toque final: Un chorrito de jugo de limón fresco antes de servir le dará un toque refrescante.
Consejos adicionales
- Sustituciones: Puedes usar jamón cocido si no tienes jamón serrano.
- Variaciones: Añade queso rallado a la masa para darle un toque extra de sabor.
- Almacenamiento: Guarda las croquetas sin freír en el congelador hasta por 1 mes. Fríelas directamente sin descongelar.
Preguntas frecuentes (FAQ)
1. ¿Puedo preparar este plato con anticipación?
Sí, puedes preparar la masa con anticipación y guardarla en el refrigerador hasta por 2 días. También puedes congelar las croquetas sin freír.
2. ¿Qué sustituciones funcionan mejor?
Puedes usar harina sin gluten y pan rallado sin gluten para una versión apta para celíacos.
3. ¿Cómo almacenar las sobras?
Guarda las croquetas fritas en un recipiente hermético en el refrigerador hasta por 2 días. Calienta en el horno para que recuperen su textura crujiente.
4. ¿Qué errores comunes debo evitar?
No cocines la bechamel a fuego alto, ya que puede quemarse. Además, asegúrate de que la masa esté bien fría antes de formar las croquetas para que no se peguen.
Conclusión
Estas Croquetas de Jamón son una opción perfecta para quienes buscan un plato lleno de sabor, fácil de preparar y ideal para compartir. Ya sea como tapa, aperitivo o plato principal, este clásico español nunca defrauda. ¡Anímate a probarla y comparte tus resultados en los comentarios! Nos encantaría saber cómo te quedó y si le añadiste tu toque personal. ¡Buen provecho!